martes, 3 de julio de 2018

La transferencia de conocimiento científico y las nuevas tecnologías en la agricultura



La transferencia de conocimiento científico y las nuevas tecnologías en la agricultura: Convenio de colaboración con sindicato agrícola para el uso de un software de avisos de riesgo y control de plagas.

Este acuerdo facilita a los miembros del sindicato agrario el uso del programa, que les permitirá aumentar la producción, ahorrar en fitosanitarios y respetar el medio ambiente

Racionalizar el uso de los tratamientos fitosanitarios, además de ser una importante mejora de carácter medioambiental y de sostenibilidad, permite al agricultor disminuir considerablemente el coste de los tratamientos contra las plagas. Dado que el coste medio de tratamientos en fruta de semilla es de 1.200 euros/ha y de 1.600 euros/ha en fruta de hueso, la correcta gestión de los productos fitosanitarios y de control biológico mediante FuturCrop podría suponer un ahorro superior al 30%, es decir más de 25 millones de euros para la totalidad del área de cultivo de los frutales de Lleida.

Actualmente, los agricultores encuentran muchos problemas al manejar sus cultivos de manzana, pera, melocotón y nectarina, puesto que estos están sujetos a muchos factores impredecibles que pueden causar pérdidas en las cosechas: plagas, condiciones meteorológicas adversas, etc. Los agricultores de Lleida tienen que luchar cada temporada contra la grafolita, la mosca de la fruta, la psila del peral, trips y pulgones, entre otras especies. Los costes de los agroquímicos se incrementan día tras día, y ya no son tan efectivos, debido a un incremento de la resistencia a estos productos por parte de las plagas. Además, se presiona al agricultor para producir con muy poco o cero cantidad de residuos químicos. Y los precios en el mercado permanecen bajos, debido al alza en la competencia doméstica y extranjera.

Para adaptarse y tener éxito en este panorama, los agricultores tienen a su alcance nuevas herramientas como FuturCrop que les permitan desarrollar explotaciones agrícolas sostenibles y rentables.

www.futurcrop.com

Cuando una plaga elimina la rentabilidad de la producción de maíz

Cada año se repite la misma situación: infestaciones incontroladas de gusano cogollero  (Spodoptera frugiperda) atacando los cultivos de maíz de América del Sur y Centroamérica: México, Bolivia, Ecuador, Argentina, etc, en grandes extensiones de cultivo y ocasionando enormes pérdidas en los productores.
Los ataques del gusano cogollero son endémicos en aquellas zonas en que la climatología es favorable para su desarrollo, temperaturas superiores a 25ºC y una humedad relativa menor al 60%. La falta de lluvias también favorecen su rápido desarrollo. Y los tratamientos contra las plagas agrícolas, preventivos o fijos por fechas de calendario, tienen muy poca eficacia y favorecen la resistencia de las plagas a los insecticidas químicos.
PÉRDIDA DEL RENDIMIENTO DE LAS COSECHAS
Si tenemos un rendimiento promedio en maíz mecanizado de 5tm/ha, las pérdidas que puede ocasionar el gusano cogollero pueden llegar al 40 % , es decir pérdidas aproximadas de $USD 416 por hectárea, a un precio promedio 2018. En regiones tropicales y subtropicales los daños regularmente son superiores a 60%. En grandes extensiones, como las que estamos hablando, supone pérdidas de cientos de miles de millones de $USD.
INCREMENTO EN EL USO DE PESTICIDAS
Si en condiciones normales, se pueden hacer 2 o 3 aplicaciones por temporada, con un coste $USD 109/TM, un ataque de la plaga puede llegar a aumentarlas a 5 o 7, aumentando su coste a $USD 211/TM. De hecho puede llegar a necesitarse  hasta 10 aplicaciones para controlar la plaga. Y el coste del tratamiento puede llegar a superar el precio de venta de la propia cosecha.
Las pérdidas de cosecha y el incremento en el consumo de pesticidas se repiten anualmente, con continuo endeudamiento del productor.
Sin embargo los ataques de esta plaga se pueden controlar sin inconvenientes, siempre que las acciones de monitoreo y tratamientos se realicen en su momento oportuno. Porque la mayoría de los  tratamiento se realizan tardíamente, cuando la larva ya se encuentra dentro del cogollo o de la espiga, según el desarrollo de la planta.

¿CÓMO DETERMINAR EL MOMENTO ÓPTIMO DE CONTROL Y TRATAMIENTO?

El momento óptimo de control y tratamiento es aquel que sucede antes de que la larva se desarrolle más de 1,5 cm (es decir, el tercer instar larvario) ya que a partir de ese tamaño las larvas se alojan en el cogollo o en la espiga, dependiendo del momento del cultivo, di­ficultando su control al no ser alcanzadas por el pesticida.

Instar L1 (recién)

Instar L1

Instar L2

Evolución instar L2

Instar L3

Evolución instar L3


En términos generales, el período larvario del gusano cogollero dura un promedio de 14-22 días, pasando generalmente por seis o siete instars larvarios. El ciclo completo (de huevo a adulto) dura aproximadamente entre 24 y 40 días. Pero no todos los años se producen los cambios en su desarrollo en las mismas fechas porque evidentemente las condiciones climatológicas que afectan a su desarrollo varían anualmente. Habitualmente las larvas pasan inadvertidas hasta que alcanzan 20 a 25 mm, cuando son detectadas por los daños que causan, que suele ser en el sexto instar larvario.

Para el adecuado control de la plaga no se trata de repetir tratamientos, o de cambiar de producto químico, sino de tener la capacidad de determinar el cuándo.

FuturCrop es un software que utiliza la relación existente entre las condiciones climatológicas y el desarrollo de la plaga, para calcular la fecha en que se producen los cambios en su ciclo biológico. FuturCrop calcula y predice las fechas en las que el gusano cogollero alcanza los estados de oviposición, eclosión de huevos, los 6 instar larvarios, pupas y adultos.

El control de la plaga es posible, simplemente conociendo los mecanismos de la naturaleza, automatizando la recogida de datos, calculando las fechas de los eventos y avisando al productor para que pueda tomar las decisiones adecuadas.

Nota: Las multinacionales fabricantes de insecticidas químicos están cambiando la estrategia de sus campañas de ventas. Sus campañas de comunicación hablan ahora del actual/futuro en el control de plagas del maíz, eliminando los pesticidas en la agricultura mediante la comercialización de semillas genéticamente modificadas. Como ya poseen su propiedad intelectual, les queda apropiarse del germoplasma del maíz.